Devarim - DeuteroNomio: repetición de palabras, rituales, recetas

Comenzamos a leer el último libro de la Torá: Devarim o en español Deuteronomio, donde Moisés da su discurso final al pueblo de Israel cuando este se prepara a entrar a la Tierra Prometida. Esta primera parashá detalla los lugares recorridos en el camino por el desierto, el establecimiento del sistema judicial, el incidente con los espías, el encuentro con las naciones de Esav, Moav y Amon, y las batallas con Sijón y Og.

Estas son las palabras [devarim] que habló Moisés a todo Israel, de este lado del Jordán frente al mar Rojo (Devarim-Deuteronomio 1:1)
Moshé vuelve a relatar y repetir mucho del contenido de las leyes presentes en los libros anteriores de la Torá. Esa puede ser la explicación de por qué este libro cuyo nombre en hebreo es Devarim (palabras), fué traducido por los griegos como Deuteronomio, es decir "segunda (deuteros) ley (nomos)". También se lo conoce en la tradición rabínica como Mishné Torá, (Repetición de la Torá).

El Rabino Rami Pavlotzky señala en su comentario para UJCL, que el pueblo precisa la repetición porque puede haber olvidado las leyes. Es algo muy utilizado en la tradición donde una y otra vez volvemos a festejar la misma fiesta, leemos el mismo texto, repetimos los mismos rituales.

Me recuerda la época en que nuestros hijos pedían leer una y otra vez el mismo cuento o jugar al mismo juego. Es que la repetición de una acción y obtener el mismo resultado nos provoca seguridad y placer.

Lo mismo sucede con la comida. Por eso hay comidas "típicas" que se repiten en la dieta de cada región o familia. Por ejemplo, en casa nos gusta comer Torta Pascualina, plato típico que preparaban las abuelas Paulina, Chiquita, Raquel y que hasta hoy seguimos preparando. Tal vez esa sea la razón por la que a Helen se le ocurrió proponerla cuando en Ottawa en julio del 2013 le preguntaron "¿qué se puede hacer con acelga?".

Escribe Helen: "Estoy en Ottawa y los jardines de mis compañeros de oficina están llenos de acelgas prontas para cosechar. Nuestra humilde pascualina sale a salvarlos de las montañas de hojas verdes. Mi amiga Wendy hizo una pascualina riquísima que compartimos con el grupo en mi almuerzo de despedida de Ottawa".

Nuestra tradición consiste en repetir, pero ¡eso no la hace aburrida! Seguramente el sabor de la acelga canadiense en el mes de julio, sea toda una innovación para nuestro paladar
http://matkonhashavua.blogspot.com/2013/07/devarim-pascualina-de-acelgas-de-verano.html






¿Devarim (palabras) o devorim (abejas)?

Otro midrash sobre el nombre de este libro: “Palabras”, en hebreo "devarim" es parecido a "devorim" (abejas), pero en idish se confunden porque se pronuncia "devoirim". Nuestros sabios comparan a las palabras críticas que dirige Moisés al pueblo de Israel con las abejas y sus molestos aguijones. Es paradójico que la picadura de una abeja molesta al que pica, pero a su vez causa mayor daño a la propia abeja que muere. Algo parecido le pasa a Moisés que muere al final del libro de Devarim. Este comentario nos da para pensar cuando escuchamos una crítica. Por un lado nos duele a nosotros los criticados, pero también debemos tener en cuenta lo que le duele a quien la realiza.

Hablando de abejas, compartimos una receta con miel combinada con picante para una salsa muy especial.
http://matkonhashavua.blogspot.com/2015/07/devarim-salsa-de-miel-de-abejas-que-pica.html





Entradas y un nuevo libro

Moshé describe las travesías del pueblo en el desierto, mencionando los lugares por donde pasaron, entre los cuales se encuentra Kadesh-Barnea - hoy al sur del Negev en la frontera con Egipto.

אַחַ֨ד עָשָׂ֥ר יוֹם֙ מֵֽחֹרֵ֔ב דֶּ֖רֶךְ הַר־שֵׂעִ֑יר עַ֖ד קָדֵ֥שׁ בַּרְנֵֽעַ׃
Jornada de once días hizo Israel desde Jorev, por el camino de la montaña de Seír, hasta Kadesh Barnea. (Devarim 1:2)
Barnea le da el nombre a un nuevo cultivar de olivo israelí desarrollado por el Prof. Shimon Lavie y que se cultiva en muchos países, incluido el Uruguay. El Barnea tiene un alto rendimiento y produce un aceite de oliva muy delicado.

Todo inicio tiene una mezcla de sensaciones. Al comenzar un libro sentimos pereza por los cientos de páginas que estamos enfrentando y a la vez imaginamos con curiosidad lo que podremos descubrir en el texto. Leemos la tapa, la contratapa, el resumen, datos sobre el autor y nos lanzamos al prólogo.

Parashat Devarim es el flashback al "capítulo anterior de la serie" y a la vez nos prepara para revivir en el nuevo libro "lo más significativo" de la historia de los cuatro anteriores. En ese sentido, prepara el aroma y el ambiente con que vendrá el texto que sigue.

Entonces, para entrar en el libro de Devarim, una “entrada” con la que siempre comenzamos nuestra cena de shabat - bruschettas de tomate con aceite de oliva. El aroma del ajo, suavizado por las caricias de las olivas, nos prepara para saborear y compartir la cena familiar.
http://matkonhashavua.blogspot.com/2011/08/devarim.html







Chispas de santidad en la comida

En el segundo capítulo de Devarim leemos sobre la travesía de los israelitas entre pueblos hostiles:

אֹ֣כֶל תִּשְׁבְּר֧וּ מֵֽאִתָּ֛ם בַּכֶּ֖סֶף וַאֲכַלְתֶּ֑ם 
Alimento comprareis de ellos por dinero y comeréis (Devarim / Deuteronomio 2:6)
Es difícil imaginar a unos jasidim discutiendo sobre comida y dietas, pero eso es lo que parece el comentario que realiza Mevasser Tsedek (1798) sobre este versículo.

La palabra usada en hebreo para "comprar" en este caso es "tishberu" - romperán. El Maggid Dov Baer decía que esta frase significa que cuando comemos mucho y con muchas ganas - ese deseo abrumador - debemos "romperlo" y parar de comer.

Pero M. Tsedek no está de acuerdo. Hace uso del artilugio de la guematria (el sistema que asigna números a las letras del alfabeto hebreo) para demostrar lo contrario. La palabra alimento / ojel en hebreo es numéricamente idéntica a dos de los nombres Divinos. Al alimentarnos es como si estuviéramos acercándonos a la Divinidad, elevando las chispas de santidad que están en la comida. Por lo tanto estamos obligados a comer.

¡Nosotros nos sentimos muy identificados con este segundo jasid! Alimentarnos es conectarnos con el orígen de la vida.

Para disfrutar de una deliciosa comida y sin romper la dieta, sugerimos estas espinacas con huevos al horno para una cena de entresemana. Espinaca es baja en calorías y el huevo nos conecta con la creación.
http://matkonhashavua.blogspot.com/2014/07/devarim-espinacas-con-huevo-dos-tiempos.html




Al final de la parashá Moshé vuelve a mencionar la entrega del territorio en la "Margen Oriental del Jordán" a las tribus de Reuven, Gad y la mitad de Menashé, pero agregando una fundamentación:

pues sé que tienen mucho ganado. (Devarim-Deuteronomio 3:19)
El ganado hace necesario que se queden en tierras adecuadas para pastoreo, sin que esto implique el abandono de sus tribus hermanas.

Desde la "Margen Oriental del Uruguay", bendecida con “Mucho ganado”, y en esta época de frío invernal, nos inspiramos para preparar un buen caldo de carne.

Es muy fácil cocinar una olla grande, guardar porciones de caldo en el congelador y así transformar esta rica sopa en "instantánea".
http://matkonhashavua.blogspot.com/2012/07/devarim-sopa-con-fideitos-de-huevo.html

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