Naso - nos ponemos la cocina al hombro
En la lectura de esta semana, parashat Naso, la Torá describe el rol y tarea asignado a cada una de las familias de los Levitas al momento de cargar los elementos del tabernáculo. A las familias de Guershon y Merari les tocan carros con bueyes para transportar cada una de las partes, pero "... a los hijos de Kehat no les dio [los carros con bueyes], porque les tocaba a ellos el servicio de las cosas santas; por lo tanto, las habían de llevar sobre sus hombros." (Bamidbar/Números 7:9) Menahem Mendel de Kotzk, explica : "llevaban sobre sus hombros" con esfuerzo y atención (para evitar que se caiga) lo más preciado del tabernáculo ("las cosas santas"). La santidad no se alcanza sin esfuerzo y atención. Como diríamos en lenguaje coloquial: hay que "ponerle el hombro". Este otoño invernal nos inspira a "poner el hombro" para hacer una cazuela calentita (en especial para los que estamos viviendo este frío polar en el Río de la Plata)