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Vaiejí - guefilte fish de hermanas

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La parashá de esta semana, es una de esas instancias en las cuales la Torá nos habla con ironía. Avraham Burg llama la atención en su libro Very Near to You , que el nombre de la parashá es Veyejí (y vivió) pero en realidad relata los preparativos y la muerte de Iaacov y Iosef, entregando bendiciones a sus hijos (que a veces se confunden con maldiciones ...) Elegimos para esta semana, la bendición de las bendiciones; es la bendición que la tradición ha seleccionado para que entreguemos nuestros mejores deseos a nuestros hijos. Y tomó José a los dos, a Efraín a su derecha, a la izquierda de Israel, y a Menashé a su izquierda, a la derecha de Israel, y se acercó a él. Y extendió Israel su mano derecha y la puso sobre la cabeza de Efraín que era el menor, y su izquierda sobre la cabeza de Menashé, guiando con conocimiento sus manos, aunque Menashé era el primogénito. (Bereshit / Génesis 48:13 – 14) Y les bendijo en aquel día diciendo: En vuestro nombre bendecirán a los hijos de Isr

Matot - Mila_nesa - cuidando nuestras palabras

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En los últimos capítulos del libro Bamidbar/Números, Moshe explica al pueblo de Israel la importancia de las palabras: "Todo lo que sale de su boca, se hará " (Bamidbar/Números 30: 3) La palabra humana tiene un efecto indiscutible en el mundo y la vida de las personas. La Torá resalta el poder de la palabra. Desde la creación (cuando Dios crea el mundo con la palabra), hasta el énfasis en cuidarnos de no insultar al converso o al discapacitado. Tenemos que ser muy cuidadosos con nuestras palabras, porque son poderosas. Tienen el poder de dañar o sanar, de elevar o denigrar. Hace un tiempo aprendíamos de un maestro (la memoria nos falla y no recordamos cual maestro), que aquello que decimos es intangible, inmaterial, y por lo tanto las palabras toman vida propia. Si escribimos algo, lo podemos borrar; si rompemos algo, lo podemos pegar; pero una vez que las palabras salen de nuestra boca ya no podemos recuperarlas. Es como cuando mandamos un e-mail: toma vida propia y ya